El entendimiento del proceso de elaboración y validación del conocimiento científico es central en toda
ciencia formal y fáctica, siendo la racionalidad lógica-matemática de fundamental importancia. Este
conocimiento, sin embargo, no agota las competencias necesarias para el desempeño profesional debido a que
las actividades están condicionadas a la eventual integración de equipos de trabajo interdisciplinarios o al
enfrentamiento de posibles dilemas éticos como consecuencia de los conocimientos especializados utilización.
Por esta razón es importante que el estudiante adquiera la capacidad de integrar sus conocimientos
especializados a ese conocimiento más amplio que denominamos nuestra cultura. En este sentido, es
importante incluir en los contenidos una mirada histórico-social de manera que el estudiante pueda reflexionar
sobre el modo en que se configuran valores, normas, conflictos de intereses y relaciones de poder en nuestra
sociedad. De esta manera, no solo se apunta a la formación profesional sino también a la formación crítica
y ciudadana del estudiante.